martes, 12 de octubre de 2010

Cuando era niña

Mi abuela dice que los niños con el futuro, que con sus sueños el mundo puede cambiar y ser mejor. Yo creo que cada niño es diferente y si bien con el futuro cuando son pequeños muchas cosas se pierden cuando llegan a su presente y sí, lo digo por experiencia.

Cuando era niña…

Cuando era niña creía que las nubes eran de algodón de azúcar que un día viajaría en avión y las probaría… Ahora, a mi edad, nunca he viajado en avión y sé que las nubes no son más que una masa de agua.

Cuando era niña creía que el cielo y el mar se juntaban en algún punto, en el punto final… Ahora, a mi edad sé que el cielo y el mar no tienen fin y nunca se juntan.

Cuando era niña reía por cualquier simpleza, lloraba por cualquier tontería y me enojaba muy poco… Ahora a mi edad, me enojo por cualquier tontería, lloro por nada y soy feliz con cualquier simpleza.

Cuando era niña soñaba que era una princesa, mis padres unos dragones pero un día mi príncipe azul llegaría para salvarme… Ahora, a mi edad aunque mis padres siguen siendo unos dragones, yo no soy una princesa y mi príncipe azul es más un hombre común.

Cuando era niña los sábados por la noche eran de hot cake y malteada de chocolate… Ahora, a mi edad los sábados son de alcohol y frituras.

Cuando era niña, soñaba con ser presidente, astronauta, miss universo, un alien. Soñaba con ser algo diferente, algo que pudiera cambiar el mundo, algo digno de recordar, soñaba con que la gente me amara. Me daba miedo estar sola, me asustaba la muerte, me aterraba salir a la calle y perderme. No ver caricaturas era mortal.

Ser niña el único problema era que quería ser grande. Quería dejar las muñecas, las tobilleras largas, que mi madre dejara de meterme la camiseta dentro del calzón, quería dejar atrás una vida de sueños y fantasías para vivir una realidad.

Ahora, a mis 24 años. Mis problemas son muchos, la realidad es por mucho cruel y extraña. Ya no tengo muñecas pero sería mejor eso a manejar mi propia vida. Sigo teniendo miedo a estar sola, pero ya no importa si nadie me ama. Sé que no puedo ser importante ni cambiaré el mundo, pero sé que puedo hacer algo importante en mi mundo – aunque aun no sepa cómo- . Salgo a la calle y me pierdo y me echo a llorar pero al final regreso a casa. Mi día debe empezar con las caricaturas y de la muerte… de esa no hablaré hoy.

Cuando era niña era inmensamente feliz. Ahora soy yo

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